RPA, IoT, plataformas digitales, e-commerce y relacionados, entre las ofertas tecnológicas que están ayudando en la pandemia y que marcarán la pauta en la reactivación.
El acceso a servicios fundamentales para la cotidianidad y desarrollo humano, en especial en medio de la actual crisis sanitaria, se ha sostenido enormemente gracias a una gran aliada: la tecnología. Los conceptos de transformación y herramientas digitales son amplios, pero se sostienen básicamente de la nube, la cual, en palabras de Jorge Orozco, Gerente General de TIVIT Colombia, la multinacional de soluciones digitales para empresas, “es un habilitador que permite flexibilidad para que las compañías se mantengan competitivas, con costos variables para el manejo de sus datos o aplicaciones, y sin grandes inversiones”.
De momento, el alcance operacional y la optimización de recursos que proporciona la nube siguen siendo desconocidos para muchas empresas, pero su importancia es evidente cuando se detallan sus funciones en la actual coyuntura, al apoyar la reactivación económica en nuestros países.
El Gerente de TIVIT nos da unos ejemplos puntuales y muy reconocibles, “La prioridad en la agenda corporativa debe ser mantener a nuestros colaboradores saludables. Una de las herramientas digitales que se adapta al cumplimiento de esta tarea es la automatización o Robotic Process Automatization, que permite destinar capital humano en tareas de alto valor y que los trabajos repetitivos o de fuerza sean realizados por robots”, agrega.
“Por otro lado, muchas actividades que hacíamos de manera manual y recurrente pueden ser optimizadas, evitando desplazamientos de personal, aglomeraciones y hasta hacer que las personas se profesionalicen con nuevas capacidades técnicas, por ejemplo. La adopción de herramientas de trabajo remoto es fundamental y la nube ofrece almacenamiento y escalabilidad de acuerdo con los requerimientos de cada persona y organización”, comentó Jorge Orozco.
Adicionalmente, Jorge menciona que la salud es uno de los primeros sectores que, debido a la digitalización impulsada por la pandemia, liderará un profundo análisis en torno al empleo de la tecnología de manera inteligente y fructífera. Lo anterior, según él, “porque una vez superemos la crisis sanitaria, vamos a repensar las formas que estamos trabajando en salud, a partir de la experiencia previa, en torno a las posibilidades que nos brindaron las herramientas tecnológicas como la nube y que facilitó, por ejemplo, la práctica de la medicina remota, que derivó directamente en la descongestión de los centros de salud y la priorización de los servicios profesionales en los casos realmente urgentes”.
Por otro lado, el ejecutivo menciona que, si bien los canales digitales y de atención no estaban preparados para responder ante la explosión de la demanda que se está viviendo durante la época de confinamiento y distanciamiento social, la nube significó un respiro para los empresarios y comerciantes al potencializar actividades como el e-commerce que durante la pandemia aumentó un 300%, según Kantar, firma especializada en el análisis de percepciones y tendencias.
“La dinámica de respuesta hacia un consumidor cada día más exigente no está siendo la adecuada y, para esto, las capacidades de un ecosistema de nube son una gran solución. Asimismo, la computación en la nube permite mejorar las operaciones de producción y comercio, por ejemplo, para asegurar que los productos lleguen de manera segura y cumpliendo con todos los protocolos sanitarios. Tecnologías como el IoT, (Internet de las Cosas por sus siglas en inglés), permiten hacer ‘tracking’ o seguimiento completo de la logística”.
La inteligencia artificial también abarca un gran abanico de posibles soluciones, desde un típico chatbot que atiende los canales de atención en una página hasta aplicaciones más complejas. Todo lo anterior ejecutado desde una nube.
Ejemplos como los mencionados anteriormente demuestran que la importancia de la nube radica en utilizarla como infraestructura, para desplegar en ella funcionalidades propias de tecnologías como el RPA y el IoT. De esa manera, la nube se convierte en una llamativa oferta para reducir costos derivados de hardware y estanterías pesadas, con un impacto directo sobre la productividad y el rendimiento de las compañías.
No obstante, el almacenamiento de aplicaciones empresariales en la nube sugiere una constante modernización de estas de cara a evitar temas como las brechas de seguridad, según Orozco. “La pandemia promueve nuevos patrones y canales de consumo. En medio de esa dinámica, las empresas deben potenciar sus operaciones usando como principal herramienta a tecnologías innovadoras, entre ellas, la nube”, argumentó el ejecutivo.
“Pero en ese camino de transformación digital, las organizaciones no estarán solas, pues la amplia experiencia de socios tecnológicos como TIVIT, que a su vez es partner de los más grandes proveedores de nube en el mundo como Google Cloud, Azure, Oracle, IBM y AWS, las acompañarán en todo momento”, concluyó Jorge Orozco.
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