Te has preguntado, ¿cuál va a ser el futuro de Colombia con el nuevo presidente? Quizás la respuesta pueda variar dependiendo del candidato, quizás la respuesta pueda ser un “no sé, veremos” o posiblemente la respuesta sea un “lo mismo de siempre”.
Por Alejo Nieto, Life Coach
Pero te has preguntado, ¿cómo quieres que sea tu futuro, el de tu gente, el de Colombia, independientemente de cuál sea elegido presidente?
Incluso, te has preguntado, ¿a qué estás dispuesto a comprometerte tú para crear el futuro que quieres, independientemente del nuevo presidente? Recuerdo con claridad la actitud de mi padre el día que se conoció del asesinato de Luis Carlos Galán. Lo recuerdo tomándose la cabeza, con los ojos al borde de las lágrimas y con un tono desesperanzador, renegar por aquel lamentable suceso.
De igual manera, recuerdo ver a mi madre fumando con ansiedad mientras los noticieros arrojaban los boletines informativos de la Registraduría el día que subió al poder Álvaro Uribe, pues para ella, era la única esperanza en el país de tener una vida mejor.
Hoy en día todos estos pensamientos, todas estás emociones alrededor de las elecciones son más visibles no solamente en los nuestros, sino en los diferentes medios de comunicación se puede apreciar la angustia, la ansiedad e incluso apatía en familiares, amigos y desconocidos. Tanto en 1989, como en el 2002 y hasta el día de hoy, siempre me he formulado la misma pregunta; ¿por qué debería modificar la vida que quiero dependiendo de si es elegido x o y presidente?
Con el tiempo, he aprendido a comprender el impacto que genera la administración de un gobierno en un país, sin embargo, eso me ha llevado a tener un nuevo interrogante, ¿cómo grandes personalidades del mundo han logrado él éxito en sus vidas a pesar del presidente de turno? Inicialmente y con ingenuidad las respuestas que me daba a mí mismo ponían a la economía, las leyes, las instituciones y gobernantes en el centro del escenario.
Sin embargo, estas eran respuestas complejas y en gran parte erradas. Gracias a mi profesión y al contacto directo con las personas, pude descubrir una respuesta que, aunque pueda parecer difícil, es simple; un propósito claro de vida. Esta respuesta me ponía en el centro del escenario, me entregaba a mí el pleno poder de decidir lo que quería que ocurriera en mi vida, me sacaba del drama y el conflicto que invaden hoy las redes sociales que en lugar de unirnos nos distancian cada vez más como nación.
Tener un propósito claro en mi vida, es el regalo y la oportunidad de enfocarme en el futuro que quiero construir para mí, para los míos y para mi país. Es la grandiosa posibilidad de tomar acciones en pro de una Colombia diferente, en vez de centrarme en criticar, renegar e incluso defender una postura política. Mi postura política no significa que sea la correcta, pero si te puedo decir que, al día de hoy, voy un día a la vez construyendo la vida que quiero vivir, pues tengo claro que no siempre será elegido como presidente la mejor opción, sino el que más votos tenga y mi propósito de vida es tan valioso para mí, que no lo pondría en las manos de nadie.
Y… ¿en manos de quién dejarás tu propósito de vida?
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