Desde su primer televisor en 1970 hasta las más recientes innovaciones en pantallas con inteligencia artificial, Samsung ha desempeñado un papel central en la transformación de la industria de consumo visual. Una revisión a los hitos que han marcado cinco décadas de cambios en diseño, tecnología y conectividad.

Imagen: Samsung
La historia de la televisión ha sido también una historia de evolución tecnológica, marcada por la constante transformación del modo en que las personas consumen contenido y experimentan el entretenimiento en el hogar. A lo largo de los últimos 50 años, empresas como Samsung Electronics han sido protagonistas de ese cambio. Desde su primer televisor blanco y negro fabricado en 1970 hasta los últimos desarrollos en pantallas 8K, tecnología QLED y procesadores con inteligencia artificial, la compañía surcoreana ha influido profundamente en los estándares de calidad, diseño y conectividad que hoy definen la industria.
De acuerdo con cifras de la firma de análisis Omdia, Samsung mantiene su posición como líder global del mercado de televisores desde 2006, alcanzando una participación de 28,3% en 2024. Esta permanencia no se explica solo por su escala de producción, sino por una filosofía de innovación continua que ha sabido anticipar cambios en el comportamiento del consumidor y en los avances técnicos del ecosistema audiovisual.

De blanco y negro al dominio de las pantallas grandes
La primera etapa de Samsung en la industria televisiva arranca con modelos a blanco y negro exportados a varios continentes. En las décadas siguientes, la compañía expande su presencia con televisores a color y en 2004 introduce pantallas LCD de gran formato, como el modelo de 46 pulgadas, que redefinen el estándar de tamaño para uso doméstico.
Ese camino se consolida en 2006 con el modelo LCD Bordeaux, cuyo diseño —inspirado en una copa de vino— marca una tendencia al combinar estética y tecnología. Ese mismo año, Samsung se posiciona por primera vez como el fabricante número uno en ventas globales de televisores, posición que no ha perdido hasta la fecha.
Innovaciones que cambian el lenguaje visual
Uno de los puntos de inflexión ocurre en 2009, cuando la marca presenta el primer televisor LED del mundo en el Consumer Electronics Show (CES). Más delgado, eficiente y visualmente impactante, este avance es resultado de dos años de investigación, 3.000 patentes registradas y un equipo de 50 ingenieros.
En los años siguientes, los desarrollos se suceden con rapidez: en 2010, Samsung lanza el primer TV LED con capacidad 3D; en 2013, muestra al mercado el TV UHD más grande del mundo con 8 millones de píxeles; en 2014 y 2015, introduce nanocristales sin cadmio y pantallas curvas ajustables.
La llegada en 2017 del QLED TV, con tecnología Quantum Dot, representa otro salto, al lograr el 100% del volumen de color, lo que mejora drásticamente la calidad de imagen, eficiencia de luz y estabilidad cromática. El concepto de experiencia inmersiva se vuelve una prioridad y empieza a incorporar también el diseño, con modelos que se integran mejor a los entornos del hogar.
IA, conectividad y personalización
A partir de 2021, la introducción del Neo QLED, con Mini LED y el procesador Neo Quantum, marca la entrada de la inteligencia artificial como elemento central en la experiencia televisiva. El sistema ajusta automáticamente brillo, contraste y color de acuerdo con las condiciones del entorno, lo que optimiza el rendimiento en tiempo real.
En paralelo, Samsung fortalece su ecosistema conectado con el desarrollo de Tizen y SmartThings, plataformas que permiten a los usuarios controlar otros dispositivos del hogar desde el televisor. Desde asistentes por voz hasta el control de luces, seguridad o electrodomésticos, el televisor se transforma en un centro de gestión doméstica inteligente.
El avance en integración se complementa con propuestas que combinan funcionalidad con diseño. Es el caso de The Frame, que convierte el televisor en una obra de arte, o The Freestyle, un proyector portátil diseñado para adaptarse a distintos estilos de vida y espacios.
Samsung Vision AI: la promesa de 2025
Para 2025, Samsung lanza su propuesta más ambiciosa: Vision AI, una plataforma que refuerza la presencia de la inteligencia artificial en la visualización de contenido. Esta tecnología analiza de forma continua factores como el tipo de contenido, el entorno de visualización y el historial del usuario para adaptar la imagen y el sonido con precisión milimétrica. La promesa es una experiencia audiovisual totalmente personalizada, donde la tecnología se vuelve prácticamente invisible para el usuario, funcionando como una extensión de sus preferencias y necesidades.
Más que una evolución técnica, la historia de los televisores Samsung refleja una transformación cultural: del dispositivo pasivo en blanco y negro al núcleo inteligente del hogar conectado. Su influencia no solo ha definido estándares de calidad y diseño, sino que ha ayudado a redefinir la relación entre las personas y la pantalla, integrando tecnología, arte, conectividad y personalización en un mismo objeto.
En 2025, con Vision AI como próxima frontera, Samsung no solo mira hacia el futuro de la televisión, sino que propone reinventar la experiencia de ver, escuchar e interactuar en una era dominada por la inteligencia contextual.